Utilizamos principalmente los magueyes espadín, cuishe, tobalá y tepeztate, aunque hay muchas otras variedades.
Los agaves tardan entre 8 y 30 años en madurar.
Una vez listo, se corta la planta dejando solo el corazón o piña del agave. Y por cada agave silvestre que se corta se plantan dos agaves.
JIMA DEL maguey
De acuerdo con la tradición, en la jima es donde los corazones del agave son separados de sus hojas.
En el caso del espadín se le deja 1cm de la penca porque tiene buenos azúcares.
En el caso de los silvestres, se razuran como fruta ya que las pencas no tienen azúcares.
COCCIÓN DEL AGAVE
Las piñas se cocinan en un horno cónico hecho en la tierra, tapado con piedras volcánicas calientes, hojas y leña endémica de la región.
Esta cocción dura entre 5 y 7 días.
Este proceso de cocción es a menudo lo que le da al mezcal sus característicos sabores y aromas complejos.
MOLIENDA
Las piñas cocidas se muelen tradicionalmente con una tahona (piedra circular de approximadamente una tonelada) que es arrastrada por un caballo que vive en el palenque.
Este proceso puede durar has ta una semana y es donde se liberan los jugos del agave cocinado.
FERMENTACIÓN
Los agaves molidos se colocan en tinas de madera de 1,000 litros, con agua de pozo tibia y se deja fermentar de forma natural.
Es en este paso del proceso donde el maestro pone toda su experiencia generacional en práctica para saber el momento donde ya esta listo el tepache para su destilación.
El proceso depende del clima, por eso puede variar entre 7 y 10 días.
DESTILACIÓN
El líquido fermentado se destila al menos dos veces en alambiques de cobre de 250 litros.
La primera destilación se llama «ordinario» (tepache 40% y bagazo 60%) y la segunda «mezcal».
Este proceso puede durar más de 24 horas.
Luego de destilar, el maestro hace el ajuste alcohólico utilizando el cuerpo o corazón de lo destilado para embotellar y servir.